viernes, 16 de marzo de 2012
Cupido
Lo escuché, atenta pero triste, o más bien compungida, preocupada por mi ambición. Cuando me contó esa historia supe que no había amor ni grande ni bello, ni fuerte ni extenso que yo pudiera darle a cambio de su corazón. Cupido es un cretino. Qué sinsentido esta humanidad en la que no se puede comprar amor con amor, con mi amor de quinta que se desgarra hilo a hilo desnudándome, matándome, desvaliéndome.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario